Desde que l’agence decidió crear un departamento Web, las cosas empeoraron bastante. No jode tanto el incremento de presencia testicular por los pasillos (ni el olor a bola transpirada en el baño del quinto piso) como el aumento en el número de empleados que bajan a la cocina entre la 1 y las 2 para almorzar.
La aglomeración de personas es tal que las sillas no alcanzan (más de uno come de pie), la cola para el microondas es desmesurada, y la mini nevera desborda de bolsas, tuppers y bebidas. La gente le pone nombre a sus yogures y botellitas (a raíz de algún que otro robo de provisiones), y te putean cuando en los estantes del frigo les bloqueás sus recipientes con los tuyos.
Yo marco territorio como puedo. Mi comida la meto dentro de una bolsa de plástico gris donde se ve un pie de mujer con un zapato negro y se lee “Angelini - Cabildo 1867 - Buenos Aires - Teléfono 4783-2710”. Y a mi lata de Coca-Cola -que reposa en un estante de la puerta de la heladerita- le puse un post it que dice “Touche pas à mon Coca!” (=No toques mi Coca!).
Simpatiquísima la petite argentine!
La aglomeración de personas es tal que las sillas no alcanzan (más de uno come de pie), la cola para el microondas es desmesurada, y la mini nevera desborda de bolsas, tuppers y bebidas. La gente le pone nombre a sus yogures y botellitas (a raíz de algún que otro robo de provisiones), y te putean cuando en los estantes del frigo les bloqueás sus recipientes con los tuyos.
Yo marco territorio como puedo. Mi comida la meto dentro de una bolsa de plástico gris donde se ve un pie de mujer con un zapato negro y se lee “Angelini - Cabildo 1867 - Buenos Aires - Teléfono 4783-2710”. Y a mi lata de Coca-Cola -que reposa en un estante de la puerta de la heladerita- le puse un post it que dice “Touche pas à mon Coca!” (=No toques mi Coca!).
Simpatiquísima la petite argentine!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario