Yo lo bautizaría « el rincón de la penitencia ». Como esa esquinita del aula donde en el siglo pasado mandaban al que se portaba mal a mirar la pared o al que no sabía la respuesta a ponerse una vincha con orejas de burro.
Éste está al fondo del open-space, justo al lado de la tetera eléctrica, y se compone de un escritorio como el de todo el mundo (con el mismo ordenador y el mismo teléfono). La diferencia es que –generalmente- éste está vacío, lo cual le da un aire un poco fantasmagórico.
Pero de vez en cuando cae un stagiare adolescente (un pasante o becario) para hacer unas prácticas para su colegio secundario. Y durante una semana nos ofrece siempre la misma imagen decadente.
El pibe llega el primer día, con el culo entre las patas, como si alguien le fuera a pegar por principiante. Se instala en el rincón, alguien le prende la compu y le hace entrega de un folleto que describe con muy pocas ganas lo que hace l’agence. Encorvado en la silla y sin coraje como para osar preguntar “y ahora qué?”, el púber hace como que lee el tríptico durante todo el día y de vez en cuando se cuelga mirando el fondo de pantalla que muestra una botellita de Coca-Cola dando vueltas. El mes pasado tuvimos la excepción de recibir un muchacho audaz que se bajó el messenger y se dedicó a chatear toda la semana sin disimulo. Lo más triste de estas reiteradas situaciones, es que mientras el estudiante realiza su pasantía junto a nosotros (o sea, mientras babea mirando el horizonte por la ventana), nadie le dirige la palabra. Na-die. En todo el día. Durante toda la semana.
Qué impresión les queda a estos tan poco afortunados jóvenes sobre el mundo laboral? Por qué tanto show con la primera experiencia profesional de un teenager si en vez de ayudarlo vas a ignorarlo? Por qué no le ponés una pistola en la boca y apretás el gatillo sin remordimiento ni vergüenza?
Yo juro, en esta agencia, no entiendo nada de nada.
3 comentarios:
Podrías convertirlo en tu buena acción de la semana: dirigirle la palabra, ofrecerle una Coca, explicarle cómo se DEBERÍA trabajar y cómo se trabaja; eso también es parte del mundo del trabajo que se les pretende mostrar, y a lo mejor le evita un clash a posteriori. Last but not least, sería una lección de calidez sudaca, Superpowerful Agusita. (La imagen de Blairwitch project, escalofriante).
"cómo se DEBERÍA trabajar y cómo se trabaja" es algo que nunca podria explicarle porque no sé de qué se trata.
ps: la funcion, la forma y el contenido (CADA combinacion de palabras) de tu comment te delatan MAL, anonimo.
hace muy poco una pasante me dijo: "como ingeniera mujer, vos sos mi ídola" y juro que fue el mejor halago recibido en mucho tiempo. los pasantes son puros, están limpios, y podés alusinarlos con poco, coacheá a un pasante, lo ayudarías mucho y además es muy gratificante.
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