Faltan menos de dos semanas para las elecciones presidenciales de mi país. Empiezo a inquietarme ya que carezco de un poco de update con respecto a la situación. Todavía me queda el sabor amargo de mi último voto que fue destinado a un cobarde que supo escaparse de la Casa Rosada en helicóptero cuando el país estaba en llamas. Y me digo que debería dedicar un poco más de mi tiempo a hacer research sobre las diferentes propuestas de los candidatos. La cosa no es tan simple ya que el bipartidismo clásico se fue a la mierda hace bastante y las nuevas agrupaciones políticas me resultan demasiado ajenas. Ya no se habla de peronistas y radicales…en realidad, tengo la impresión de que ya no se habla de nada.
Intento orientarme preguntándole a mis progenitores por quién van a votar. Papá, ferviente admirador de Bush (mucha vergüenza), me confiesa que va a votar al partido de los piqueteros. Y Madre tenía un candidato el jueves por la noche y otro el sábado por la tarde. Le pregunto que qué onda López Murphy, y me dice que no, que a ese lo mata la voz que tiene : un presidente que habla de esa manera pierde toda seriedad. A mí no me parece tan terrible.
Empiezo con la investigación y me entero que ahora López Murphy representa a Recrear para el Crecimiento. Voy a la web oficial de este partido con nombre de ONG y aparezco en la página del PRO, el partido de Macri. López Murphy está con Macri ? Pero Macri no era peronista ? Y López Murphy no era radical? Agusita, detente. Ya no sirve seguir pensando con esa lógica. Los radicales y los peronistas murieron. De López Murphy me quedo con su blog de oposición y su campaña en You Tube. Buen marketing. Su proyecto de gobierno, demasiado teórico.
Sigo con Elisa Carrió. Ok. En mi mente, Lilita (como se la conocía por aquel entonces), era una mujer fuerte, sin miedo, de lengua suelta y delirios místicos. Una contestataria de toda la vida. No pensaba antes de hablar y tampoco filtraba lo que decía. Así, podía hacer una denuncia de corrupción públicamente (generalmente seguida por un torrente de amenazas de muerte) o agarrar un rosario y ponerse a rezar frente a las cámaras. Me dice la gente que Lilita cambió. Que está más centrada. En la página de su partido, Coalición Cívica, encuentro su propuesta de 101 páginas. Le faltan las eñes y las letras con tilde. Me resulta un poco incómodo leerlo pero me parece un poco más profundo y pragmático que el de LM.
Ahora me toca Fernando “Pino” Solanas, el director de cine de “Memoria del saqueo” , y su Proyecto Sur. Recibí un mail de Facundo Solanas (hijo? sobrino? primo?) con las propuestas de este Michael Moore del subdesarrollo. Los links incluídos en el mensaje no conducían a ninguna parte. Por fin encuentro su web. No, non mi piace. Igual , como que para las encuestas casi que Pino no existe.
Paso a Lavagna. Innevitablemente pienso en una lasagna y me da hambre. Busco su plan. No me queda claro a qué partido representa. Lavagna era radical pero también trabajó para los peronistas. Un swinger político? Madre dice que fue el único que hizo algo concreto después del 2001 para sacar al país de la crisis. Madre también dice que “dicen que está con Duhalde”. Rumores? Verdades? Mi hermano dice que lo va a votar porque “las veces que lo escuché hablar no me pareció un imbécil (y los otros sí)”. Y además, que hizo un test en La Nación y le dio que vote a Lavagna.
Por fin llego a ella. Madame Kirchner con su Frente para la Victoria. Leo sus propuestas. Pero no le creo nada. Un blef, pienso. Me cuesta creerle a una mujer que se niega a dar entrevistas. No tenemos piel. Ella usa demasiado rimmel. Mucha máscara en sus pestañas. Como que tanto maquillaje esconde algo. Dan ganas de gritarle: “Sacate la careta, Cristina!”. Y además como que me niego a tener una presidenta que usa medias color piel brishantes y cadenita de oro por encima del tobillo (y de las medias!). Una grasa. Una grasa que dicen que va a ganar porque “está todo arreglado”.
Me da miedo. Otra vez hay que votar al menos peor. El futuro me da terror...otra crisis? Y encima Página 12 que desvela que las listas electorales de todos los partidos están invadidas por evangelistas que intentan filtrarse como sea en el entramado político de la Argentina.
Voy entonces a La Nación y hago el maldito test: mis ideas coinciden en un 62,5% con las de Carrió, 25% con Lavagna y 12,5% con López Murphy. Con la señora Kirchner no sé si coincido en algo porque ella se negó a participar del jueguito interactivo. Pero sospecho que en materia de ideas (al igual que en estilo e imagen), no nos unen muchas cosas.
Intento orientarme preguntándole a mis progenitores por quién van a votar. Papá, ferviente admirador de Bush (mucha vergüenza), me confiesa que va a votar al partido de los piqueteros. Y Madre tenía un candidato el jueves por la noche y otro el sábado por la tarde. Le pregunto que qué onda López Murphy, y me dice que no, que a ese lo mata la voz que tiene : un presidente que habla de esa manera pierde toda seriedad. A mí no me parece tan terrible.
Empiezo con la investigación y me entero que ahora López Murphy representa a Recrear para el Crecimiento. Voy a la web oficial de este partido con nombre de ONG y aparezco en la página del PRO, el partido de Macri. López Murphy está con Macri ? Pero Macri no era peronista ? Y López Murphy no era radical? Agusita, detente. Ya no sirve seguir pensando con esa lógica. Los radicales y los peronistas murieron. De López Murphy me quedo con su blog de oposición y su campaña en You Tube. Buen marketing. Su proyecto de gobierno, demasiado teórico.
Sigo con Elisa Carrió. Ok. En mi mente, Lilita (como se la conocía por aquel entonces), era una mujer fuerte, sin miedo, de lengua suelta y delirios místicos. Una contestataria de toda la vida. No pensaba antes de hablar y tampoco filtraba lo que decía. Así, podía hacer una denuncia de corrupción públicamente (generalmente seguida por un torrente de amenazas de muerte) o agarrar un rosario y ponerse a rezar frente a las cámaras. Me dice la gente que Lilita cambió. Que está más centrada. En la página de su partido, Coalición Cívica, encuentro su propuesta de 101 páginas. Le faltan las eñes y las letras con tilde. Me resulta un poco incómodo leerlo pero me parece un poco más profundo y pragmático que el de LM.
Ahora me toca Fernando “Pino” Solanas, el director de cine de “Memoria del saqueo” , y su Proyecto Sur. Recibí un mail de Facundo Solanas (hijo? sobrino? primo?) con las propuestas de este Michael Moore del subdesarrollo. Los links incluídos en el mensaje no conducían a ninguna parte. Por fin encuentro su web. No, non mi piace. Igual , como que para las encuestas casi que Pino no existe.
Paso a Lavagna. Innevitablemente pienso en una lasagna y me da hambre. Busco su plan. No me queda claro a qué partido representa. Lavagna era radical pero también trabajó para los peronistas. Un swinger político? Madre dice que fue el único que hizo algo concreto después del 2001 para sacar al país de la crisis. Madre también dice que “dicen que está con Duhalde”. Rumores? Verdades? Mi hermano dice que lo va a votar porque “las veces que lo escuché hablar no me pareció un imbécil (y los otros sí)”. Y además, que hizo un test en La Nación y le dio que vote a Lavagna.
Por fin llego a ella. Madame Kirchner con su Frente para la Victoria. Leo sus propuestas. Pero no le creo nada. Un blef, pienso. Me cuesta creerle a una mujer que se niega a dar entrevistas. No tenemos piel. Ella usa demasiado rimmel. Mucha máscara en sus pestañas. Como que tanto maquillaje esconde algo. Dan ganas de gritarle: “Sacate la careta, Cristina!”. Y además como que me niego a tener una presidenta que usa medias color piel brishantes y cadenita de oro por encima del tobillo (y de las medias!). Una grasa. Una grasa que dicen que va a ganar porque “está todo arreglado”.
Me da miedo. Otra vez hay que votar al menos peor. El futuro me da terror...otra crisis? Y encima Página 12 que desvela que las listas electorales de todos los partidos están invadidas por evangelistas que intentan filtrarse como sea en el entramado político de la Argentina.
Voy entonces a La Nación y hago el maldito test: mis ideas coinciden en un 62,5% con las de Carrió, 25% con Lavagna y 12,5% con López Murphy. Con la señora Kirchner no sé si coincido en algo porque ella se negó a participar del jueguito interactivo. Pero sospecho que en materia de ideas (al igual que en estilo e imagen), no nos unen muchas cosas.
3 comentarios:
Agus, no hay partidos. Hay candidatos. Que surgen primero y luego forman un partido, o buscan apoyo en lo que quedó del radicalismo o intentan disputarse el peronismo.
Es como un gran supermercado (pero del que tiene solo segundas marcas). Las góndolas estan llenas de candidatos, que están en oferta. Y la gente compra (vota) con el bolsillo, asi que no es de extrañar que compren (voten) al más barato.
Vos votaste a De La Rua?
Ahora entiendo todo!
Maldita niña leche!
muy buena la comparacion con el super: hoy la voy a plagiar para explicarle a J la situation de mi pais.
yes, bro, I did it. It's ALL my fault.
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